A pedido de Antonia....
A las cuatro y treinta y tres de la tarde, Jorge Allen baja del colectivo. Permanece un minuto en la vereda de Lacarra, observando a una mujer que se sube al mismo colectivo del cual él se bajó. Es hermosa y ha nacido para complacer a Allen y para ser complacida por el poeta. Allen sabe que de este momento depende su vida entera. No titubea y vuelve a subirse al 182 para torcer un poco el destino y viajar hacia Haedo, donde lo espera la felicidad.
1 Comments:
le doy las gracias algo atrazadas
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